26.8.08

treinta y seis


ya no se si sos cagon o estupido

ya no se si jugarme o contratar un sicario

empiezo a temer de que en realidad


simplemente



seas un forro

1.8.08

treinta y cinco

Y un hombre me grita

Te has quedado prendida a un fleco de mi alma herida, a lo mejor te estas muriendo como yo.

Y en un punto suena mas que razonable, por lo menos una parte.

Y yo no te se decir bien de que o de donde me quede prendida. Pero ahí estoy, hasta las venas agarrada. Soñando con la yema de mis dedos y fragmentos de tu cuerpo. Junto a la sangre la ansiedad el deseo y otros lujos.

Y en que pensaba. A tus pies de nuevo, de rodillas. Sedienta.

Y eligiendo dios sabe que fundamento para mantenerme a salvo del recuerdo. Ayer me dijeron, nos movemos para alcanzar el placer o evitar el dolor. Y se contradicen las dos pautas si lo que quiero es amanecer junto a tu cuerpo con la luz entrándonos por la ventana. Amaneciéndonos. Si quiero beberte, con humo y palabras, entre tu mano y la pared.

Decimelo, que lo que quieras vos me lo pide el cuerpo.