14.4.09

cincuenta

Como tantas otras veces, la sonrisa de costado y el pecho agitado y abrir de puertas
haceme un trago y dame fuego, hace un tiempo ya, parecen años.

Perdida la linealidad, por hechos no por relojes, tu piel tiene casi el mismo sabor y no me asusta, y no corrompe, es más liviana hoy.
Y tu mirada seria de charla a desgano y de besos a deshoras, de tomarme la mano y buscar oscuridad reparadora.

Hace un tiempo, hablando del mar y de las putas, te conté de como algunas cosas ya no eran, de como había pasado el tiempo y a seguir caminando vida, que ha sido un lujo pero hasta acá.

Y fue un lujo, claro, un lujo y mis manos en las rejas y tu respiración en la nuca y putas y benditas como dice la canción

Y simplemente eso
Como de no creer que simplemente, que justamente eso.

3 comentarios:

MQDLV dijo...

esto me gustó, sabés, porque me gusta la resignación ante lo inevitable. un beso por acá.

Anonimo dijo...

Muy bonito todo lo que escribis :)

El viento a contramano dijo...

y para que más que eso? quizá eso sea suficiente.